#SaveRalph fue el nombre de una cruda campaña para concientizar sobre los testeos de la industria de higiene, cosmética y belleza realizados en animales, particularmente conejos, elegidos por su docilidad y rápida tasa de reproducción.

 “Ningún animal debería sufrir ni morir en nombre de la belleza”, es la sentencia final del descarnado cortometraje.

 Mientras que en 2013 la Unión Europea  alcanzó la prohibición de pruebas en animales, y otros países se fueron sumando a esta medida, como  Nueva Zelanda, India, Taiwán, Guyana Francesa, Colombia, México y Guatemala. En la región, Brasil y Chile son los más avanzados en la aprobación de proyectos de ley. Otros países, como Argentina, todavía no cuentan con normativa específica, y sólo el compromiso y la buena fe de las marcas las lleva a adoptar procedimientos alternativos para testear los productos.

 El listado de marcas respetuosas y libres de crueldad animal en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú se puede consultar en la web de la organización sin fines de lucro chilena Te protejo, creada en 2012 y primera en Latinoamérica en certificar empresas que no testean en animales. Allí figuran más de 60 firmas dedicadas al cuidado facial, corporal, capilar, higiene, hogar, intimidad, embarazo e infancia, entre otros rubros. Se las puede identificar en los puntos de venta por el  uso de los logotipos oficiales existentes en la actualidad, todos ellos con la silueta o figura de un conejo y creados con el respaldo de tres asociaciones internacionales: Cruelty Free International- Leaping Bunny Programme, PETA y Choose Cruelty Free.

Realizando un consumo consciente, todos podemos colaborar.